TERAPIAS
MASAJE DEPORTIVO O DESCARGA
Es muy habitual que los asiduos practicantes del deporte, el fitnees o la alta competencia acaben finalmente tumbados en la camilla cuando ya llevan unos cuantos días arrastrando molestias, cuando las piernas llevan pidiendo a gritos un poco de atención o, en el peor de los casos, cuando tenemos, o al menos lo intuimos, una lesión.
No le damos a veces la suficiente importancia a unas de las partes de nuestra preparación, lo que se suele llamar el entrenamiento invisible u oculto: hidratación, alimentación, descanso... y en esta parte podríamos incluir el masaje de descarga, desde un punto de vista preventivo y recuperador.
Lo ideal sería pasar a recibir uno cada quince días o al menos una vez al mes aunque la realidad del día a día con la escasez o incompatibilidad de horarios (nuestros y/o del terapeuta) e incluso el coste económico nos hace, en la mayoría de ocasiones, posponerlo o descartarlo. Nos preocupamos de cuidar nuestro material, especialmente las zapatillas, teniendo en la mayoría de casos varios modelos que se ajustan a nuestras características, tipo de pisada, peso, ritmos de entrenamiento, etc.… siendo conscientes de la importancia que tienen no sólo sobre nuestro rendimiento sino sobre las posibles consecuencias negativas que acarrea un calzado inapropiado, una mala maniobra o gesto deportiva, y eso también conlleva un desembolso económico.
¿QUÉ VAMOS A CONSEGUIR CON UN BUEN MASAJE DE DESCARGA?
Un buen masaje actúa no sólo a nivel de la musculatura, sino también a nivel del sistema circulatorio, del sistema nervioso e incluso del sistema respiratorio. Así pues, podemos destacar, entre otros, una serie de beneficios y de efectos como son:
- Disminución del exceso de tono y de las contracturas musculares producidas por el esfuerzo demandado a nuestro organismo y rompiendo el círculo vicioso dolor-contracción-más dolor-más contracción. Ayuda a "poner un poco en orden" y realinear las fibras musculares.
- Reducción de la fatiga y aceleración notable de la recuperación, claves en nuestro entrenamiento. Mejora de la circulación sanguínea y linfática y aumento del aporte de oxígeno a los tejidos ayudando por lo tanto a la nutrición de los mismos y a la eliminación de productos de desecho del organismo.
- Relajación a nivel general, física y mental; sensación de bienestar y reducción del estrés psicológico.
Por todas estas cosas y muchas más es un eficaz método para prevenir lesiones, poner a punto nuestros músculos, tendones, ligamentos y articulaciones y optimizar nuestro rendimiento. Debería formar parte de nuestra rutina junto a las sesiones de entrenamiento, estiramientos, el descanso, la alimentación y la hidratación ya que sus efectos van a sumar y complementar a los de ese entrenamiento propiamente dicho.
Recordad, muy importante, que los beneficios van a comenzar en el mismo momento en que el masaje comienza y van a continuar, aunque igual no lo percibamos, en las siguientes horas e incluso días.